Como muchos le dirán, el viaje es tan importante como el destino. En el caso de Avik, esto no podría ser más cierto.
A pesar de no poder moverse, Avik disfruta con el esquí adaptado, la terapia en piscina adaptada, la equitación adaptada, los juegos de arcade inmersivos y estar en barco. Le encanta cantar y que le bailen. Por último, pero no por ello menos importante, Avik es un apasionado de la comida. Ha trabajado duro para aprender a comer y es aventurero en lo que se refiere a su paladar.
Avik nació de un embarazo normal y padece una rara enfermedad genética no hereditaria asociada a convulsiones, trastornos del movimiento y retrasos del desarrollo. Como consecuencia de su enfermedad subyacente, no habla ni camina. Necesita ayuda para todas las actividades de la vida diaria.
Avik ha llevado a su familia a lugares que no podían imaginar: conocer e interactuar con personas que nunca habrían conocido, incluidas familias de niños con necesidades especiales, proveedores que ayudan a niños con necesidades especiales y personas al azar a las que Avik consigue encandilar. “Ve la humanidad de la gente y ellos a su vez reconocen la suya”, dice su madre, Priya. “A pesar de sus enormes obstáculos, consigue relacionarse con la gente. Es realmente sobrecogedor ser testigo de ello”, afirma.
Family Connection of South Carolina ofrece servicios y recursos a las familias que tienen un niño con una discapacidad o una necesidad de atención sanitaria especializada. Desde 1990 hemos atendido a más de 100.000 familias y hoy nuestros servicios son más necesarios que nunca. Nos centramos en el apoyo de padres a padres, la orientación para navegar por el complejo sistema sanitario y la asistencia en las reuniones escolares y los planes de educación especial.